Saturday, June 09, 2007

Derrota en Teruel

"Una verdadera siembra de cadáveres[...]. Aquí y allá, abatidos sobre troncos de árboles, metidos en las acequias, con los rostros dibujando el pánico, los muertos se contaban por decenas. En el silencio de la mañana se oía el rumor del agua: era lo único que se oía. Pero a pesar del viento helador y de los cendales de niebla, aún olía a guerra, a sufrimiento y muerte. Soldados nacionales -legionarios y regulares- tocaban los cadáveres, comprobando no se qué. Todo parecía difuminado, borroso y quieto, como en una pesadilla. Sólo el río tenía movimiento."

Pompeyo García Sánchez, testigo en Teruel.


El panorama tras la huída de Teruel no podría ser más desolador. Lejos de las idílicas promesas de retaguardia, comida en abundancia y tranquilidad, las líneas republicanas están sumidas en el caos. Hay un ambiente general de desbandada. Las fuerzas de élite de la República están deshechas, quebrantadas. Las listas de bajas que los mandos gritan a sus superiores en voz alta son elocuentes:

-¡Pelayo Fierro!

-¡Muerto en combate!

-¡Valeriano Rodríguez Sierra!

-¡Muerto en combate!

-¡Pedro Martínez!

-¡Desaparecido!

-¡Evilio del Burgo!

-¡Desaparecido!

-¡Damián Carvajero!

-¡Muerto en combate!

...

Y así una larga letanía de nombres, que se repetía en cada compañía. Unidades enteras habían quedado prácticamente deshechas, como la 46 División; y muchas otras tenían bajas que aconsejaban su completa reorganización. Pero no había tiempo. Los franquistas estaban más fuertes que nunca. No se conformarían con haber recuperado la capital turolense. Era su oportunidad para asestar el golpe mortal a la República.

3 comments:

Anonymous said...

Si nos ayudara a nosotros nuestra aviación igual otro gallo cantaría, los Recios tendrán su oportunidad de vengarse, toda la República la tendrá.
La próxima es batalla es nuestra redención.

Carlos San Rafael.

Anonymous said...

Jodidos, estamos jodidos. Empiezan a superarnos en todos los frentes y nuestra aviación, por muy buenos pilotos que la formen, se mantiene extrañamente al margén. Quizá sufran lo mismo que nosotros.

Paolo (entre la vida y la muerte)

Anonymous said...

Porque no nos deleitas con unas imagenes del chekista Carrillo y sus conmilitones?